martes, 18 de septiembre de 2012

Leído por ahí....

Y, maldita sea, amo cómo besas. 

No solo por tus labios, sino por tus dedos, la palma de tu mano, tu calor, la forma en que me abrazas, cómo me jalas por la cintura para acercarme a ti, cómo tengo que ponerme de puntillas para besarte o cuando juegas con mi boca un juego tan intenso que de pura suerte no muero por combustión espontánea. 

Amo cada segundo en que me haces sentir que podría besarte por siempre. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario